Al Instituto de Investigaciones Jurídicas y al Programa de Posgrado de la Universidad Nacional Autónoma de México por brindarme la oportunidad de ser una de sus orgullosas estudiantes.
A El Colegio de Sinaloa por la distinción otorgada con la Beca de Disertación Doctoral en Ciencias Sociales y Humanidades Dr. Raúl Cervantes Ahumada 2018.
Al Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (Conacyt) por la beca nacional asignada del semestre 2015-1 al 2017-2.
Al proyecto Fronteras de la Ciencia Conacyt “Constructivismo Jurídico, Cognición, Complejidad y Derecho” FC-2015/541 por el apoyo brindado para realizar una estancia de investigación en la Universidad de Edimburgo bajo la dirección del Dr. Burkhard Schafer.
A la Red Temática de Ciencias Forenses Conacyt por el apoyo brindado para realizar una estancia de investigación con el objetivo de identificar lo que se ha trabajado en materia de enseñanza de la ciencia forense en el Reino Unido, especialmente en Escocia.
A los expertos del Laboratorio de Genética Forense del Instituto de Ciencias Forenses del Tribunal Superior de Justicia de la Ciudad de México por su apertura para la aplicación de algunas entrevistas.
De manera muy especial, a mis tutores:
El Dr. Enrique Cáceres, mi maestro, quien me ha apoyado no sólo con el desarrollo de esta investigación, sino también en mi formación como investigadora desde el momento en que decidí dedicarme a la vida académica y que la UNAM fuera no solo mi casa de estudios, sino también el lugar donde desarrollar mi proyecto de vida profesional. Igualmente, le agradezco por autorizarme la presentación de resultados preliminares del proyecto Fronteras de la Ciencia: Constructivismo Jurídico, Cognición, Complejidad y Derecho, arriba referido, mismos que fueron discutidos en el marco de las VII Jornadas Internacionales de Filosofía del Derecho de la UNAM.
A la Dra. Frida Díaz Barriga, por sus invaluables enseñanzas sobre el fascinante mundo de la pedagogía, sin las cuales el carácter interdisciplinario de esta investigación hubiera sido simplemente imposible. También le agradezco por haberme abierto un mundo de potencialidades insospechadas en el fascinante mundo de la pedagogía y su relación con el derecho.
A la Dra. Zoraida García Castillo, por su dedicación como tutora, y a pesar de no ser tutores oficiales, también quiero agradecer las valiosas aportaciones a esta investigación realizadas por los expertos en genética de la Licenciatura en Ciencia Forense, Dr. Mariano Guardado y Dra. Alexa Villavicencio, así como a la Dra. Tere Ambrosio del Instituto de Investigaciones Jurídicas de la UNAM.